the flesh covers the bone
and they put a mind
in there and
sometimes a soul,
and the women break
vases against the walls
and the men drink too
much
and nobody finds the
one
but keep
looking
crawling in and out
of beds.
flesh covers
the bone and the
flesh searches
for more than
flesh.
there’s no chance
at all
we are all trapped
by a singular
fate.
nobody ever finds
the one.
the city dumps fill
the junkyards fill
the madhouses fill
the hospitals fill
the graveyards fill
nothing else
fills.
viernes, 10 de diciembre de 2004
alone with everybody
Este poema de Bukowski lleva muchos años en mi vida, y siempre acabo volviendo a él...el título ya lo dice todo...acabo volviendo a releer el poema en días, semanas o meses como este en los que te encuentras totalmente perdida en el mundo ( si es que somos así de imbéciles, que se le va a hacer...):
martes, 7 de diciembre de 2004
Conversaciones ajenas
Este post viene de mi manía por fijarme en la gente, me encanta observar a la gente y a veces vez u oyes cosas que te hacen reír o reflexionar.
SITUACIÓN: Voy por la calle y llevo delante de mí a una mujer de unos 30 con una niña de unos 6 ó 7 años.
TEMA: La niña va contándole a la mujer que hay una niña en su clase con la que se ha peleado porque es una empollona y una sabelotodo. De repente la niña le suelta a la mujer " tu también eras muy inteligente de pequeña, no?" y la mujer le responde " sí, era muy inteligente hasta que me casé con tu padre, tu nunca te cases"....
SITUACIÓN: Voy por la calle y llevo delante de mí a una mujer de unos 30 con una niña de unos 6 ó 7 años.
TEMA: La niña va contándole a la mujer que hay una niña en su clase con la que se ha peleado porque es una empollona y una sabelotodo. De repente la niña le suelta a la mujer " tu también eras muy inteligente de pequeña, no?" y la mujer le responde " sí, era muy inteligente hasta que me casé con tu padre, tu nunca te cases"....
La adolescente más fea del mundo
La adolescente más fea del mundo va sentada enfrente de mí en el tren. Vamos en unos asientos para 4 personas, 2 enfrente de 2, y estamos las dos sentadas junto a la ventana.
La adolescente más fea del mundo está bastante delgada, da un poco de pena la pobre. Lleva un sueter que deja al descubierto los huesos de sus hombros. Y el sujetador, rojo, que debe de llevarlo como complemento pues no creo que sujete nada.
La adolescente más fea del mundo tiene la nariz pelín fea, con una curva exagerada. Su nariz está repleta de poros y puntos negros, su labio deja asomar un poco de pelusilla, no me atrevería a llamarlo pelo....Bueno, el pelo, esa es otra!Lleva el pelo largo, enredado, muy grasiento, con lo cual lo lleva todo pegado a su diminuta cabeza. De vez en cuando, cuando se pone nerviosa, se amasa el pelo-...yo nunca metería mi mano en un pelo como ese, pero ella mete la mano en el amasijo de pelos y empieza a amasarlos, recuerda a la hermana de Arguiñano haciendo uno de sus pasteles.
La adolescente más fea del mundo lleva una gafas que ha elegido su peor enemigo...el mismo que le debe haber dejado irse de compras y volver con ropa de Berska.
La adolescente más fea del mundo masca chicle sin parar, cada 10 minutos se cansa de su sabor y lo tira disimuladamente al suelo ( estamos en un tren), y luego vuelve a meterse en la boca otro chicle de fresa
La adolescente más fea del mundo lleva una colonia de vainilla que me está dando dolor de cabeza.
La adolescente más fea del mundo tiene una risa muy rara. Cuando se ríe el aire sale despedido entre sus dos palas ( en el espacio que separan sus palas cabría otro chicle de fresa de los que le gustan) formando un silbido- risa de lo más extraño
La adolescente más fea del mundo tiene un chico que parece que la quiera. Está sentado junto a ella. Es muy guapo. Moreno, con unos impresionantes ojos azules...y unas patillas!! Joder que patillas, si tuviera unos años más....Deben de tener los dos unos 18, aunque soy muy mala para ponerle años a la gente( igual tienen 20..que se yo!). El novio de la adolescente más fea del mundo lleva una camiseta muy informal, de las de manga corta con una manga larga debajo, vaqueros desteñidos y botas. Es muy cariñoso.
Se enfadan. Ella le mira con desprecio ( si me miraran a mí desde detrás de esas horribles gafas así, me acojonaría). El intenta darle un beso en el cuello, sonriendo...Buf, qué cuello, es larguísimo, de esos que incitan a pegar un bocado...y qué labios, gruesos, rojos y brillantes.
Ella le da un codazo, él sigue mirandola con una dulzura que empieza a ponerme muy celosa.
Apoya su cabeza en su hombro pero no deja de cerrar esos ojos azules.
Al final consigue darle un beso...ella saca los labios hacia afuera, como Maggie Simpson cuando da un beso.
A ella no se le ha ido el cabreo....una pena porque me estaban entreteniendo y me tengo que bajar ya del tren.
Me levanto, me pongo la chaqueta, empiezo a recoger mis cosas y el tren da un frenazo. Le piso sin querer y él me coge del brazo para ayudarme mientras me dedica una sonrisa que dura 1 minuto. No se si mirar su sonrisa o sus ojos, que ahora son ya verdes, porque puestos a fantasear sobre él, prefiero que sean verdes.
La adolescente más fea del mundo está bastante delgada, da un poco de pena la pobre. Lleva un sueter que deja al descubierto los huesos de sus hombros. Y el sujetador, rojo, que debe de llevarlo como complemento pues no creo que sujete nada.
La adolescente más fea del mundo tiene la nariz pelín fea, con una curva exagerada. Su nariz está repleta de poros y puntos negros, su labio deja asomar un poco de pelusilla, no me atrevería a llamarlo pelo....Bueno, el pelo, esa es otra!Lleva el pelo largo, enredado, muy grasiento, con lo cual lo lleva todo pegado a su diminuta cabeza. De vez en cuando, cuando se pone nerviosa, se amasa el pelo-...yo nunca metería mi mano en un pelo como ese, pero ella mete la mano en el amasijo de pelos y empieza a amasarlos, recuerda a la hermana de Arguiñano haciendo uno de sus pasteles.
La adolescente más fea del mundo lleva una gafas que ha elegido su peor enemigo...el mismo que le debe haber dejado irse de compras y volver con ropa de Berska.
La adolescente más fea del mundo masca chicle sin parar, cada 10 minutos se cansa de su sabor y lo tira disimuladamente al suelo ( estamos en un tren), y luego vuelve a meterse en la boca otro chicle de fresa
La adolescente más fea del mundo lleva una colonia de vainilla que me está dando dolor de cabeza.
La adolescente más fea del mundo tiene una risa muy rara. Cuando se ríe el aire sale despedido entre sus dos palas ( en el espacio que separan sus palas cabría otro chicle de fresa de los que le gustan) formando un silbido- risa de lo más extraño
La adolescente más fea del mundo tiene un chico que parece que la quiera. Está sentado junto a ella. Es muy guapo. Moreno, con unos impresionantes ojos azules...y unas patillas!! Joder que patillas, si tuviera unos años más....Deben de tener los dos unos 18, aunque soy muy mala para ponerle años a la gente( igual tienen 20..que se yo!). El novio de la adolescente más fea del mundo lleva una camiseta muy informal, de las de manga corta con una manga larga debajo, vaqueros desteñidos y botas. Es muy cariñoso.
Se enfadan. Ella le mira con desprecio ( si me miraran a mí desde detrás de esas horribles gafas así, me acojonaría). El intenta darle un beso en el cuello, sonriendo...Buf, qué cuello, es larguísimo, de esos que incitan a pegar un bocado...y qué labios, gruesos, rojos y brillantes.
Ella le da un codazo, él sigue mirandola con una dulzura que empieza a ponerme muy celosa.
Apoya su cabeza en su hombro pero no deja de cerrar esos ojos azules.
Al final consigue darle un beso...ella saca los labios hacia afuera, como Maggie Simpson cuando da un beso.
A ella no se le ha ido el cabreo....una pena porque me estaban entreteniendo y me tengo que bajar ya del tren.
Me levanto, me pongo la chaqueta, empiezo a recoger mis cosas y el tren da un frenazo. Le piso sin querer y él me coge del brazo para ayudarme mientras me dedica una sonrisa que dura 1 minuto. No se si mirar su sonrisa o sus ojos, que ahora son ya verdes, porque puestos a fantasear sobre él, prefiero que sean verdes.
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