domingo, 21 de febrero de 2010

¡Sonríe!



De pequeños teníamos una de estas cámaras que cuando apuntas salta el muñequito de en medio y te hace reír.
Era exactamente igual que esta, de color naranja y ¡no creas que no me costó años encontrar una igual!.

Recuerdo que te la regalé unas navidades, siempre nos gusta regalarnos alguna tontería que solemos comprar en los chinos para reírnos un rato, además del tradicional regalo.
Me pareció un regalo divertido, para reírnos un poco del fotógrafo de la familia. Aunque bien pensando, hoy viendo la foto me ha parecido que fue un regalo algo cruel.

Aún me acuerdo de las tardes posando para tí y tus fotos porque tenías que entregar un trabajo el día siguiente, siempre apurando el último dia, y aún no lo tenías acabado. Siempre fuiste una persona perfeccionista y detallista, desde pequeño. Me acuerdo aún cómo te podías pasar horas pintando tus dibujos de Asterix y Obelix, sin salirte un milímetro del contorno, combinando los colores....buuuuuuf, que paciencia de verdad! La perdía yo solo de verte a tí dedicándole tanto tiempo!

Luego esa paciencia la trasladaste al mundo de la fotografía y descubrí en tí a un verdadero artista. Te admiraba por ello, siempre he admirado a la gente que nos arranca una sonrisa, bien sea con unos versos, una canción o una fotografía. Imagino que hay un poco de envidia insana en ello....quizás yo tenga también una artista dentro que aún no se ha dignado a salir.

Gracias tus clases de fotografía conocí también a tu amigo Javi, que acabó siendo más amigo mío que tuyo, siempre nos reímos también de eso....:-)

¿ pero que pasó luego? ¿ cómo es posible que la vida te haya cambiado tanto? ¿ has elegido tu este camino o simplemente te has dejado llevar por pereza?

Encontrar trabajo de fotográfo resultaba complicado. Sólo conseguías sustituciones por vacaciones en un periódico, trabajo que te encantaba. Un día llegaste y dijiste que tenías trabajo en un almacén, como transportista. Nuestros padres te animaron, te dijeron que claro, no podías estar trabajando solo 2 meses al año por mucho que te gustara. Y yo? Yo me entristecí, vi como se iban apagando poco a poco esos ojos que querían descubrir el mundo, fotografiarlo y enseñárselo a los demás como tu lo veías. Vi como tu vida fue perdiendo el color y como tu y yo también empezamos a distanciarnos. La cámara pasó a ser un hobbie al que tampoco le dedicas casi tiempo, cosa que a todo el mundo le extraña menos a mí. Porque a veces te miro a escondidas y descubro tu tristeza detrás de ese objetivo. Se que tu también te preguntas si hiciste bien o mal en abandonar tu sueño, si a final de todo valió la pena o no.

Yo sigo guardando tu cámara de juguete como recuerdo de otro tiempo y sigo esperando el día que vengas a enseñarme como usar la reflex . Y sí, sigo esperando el día que me pidas de nuevo que pose para ti, para quejarme como siempre y acabar accediendo.

viernes, 19 de febrero de 2010

me gusta besarte aunque me digas que soy una pesada

Me gusta besarte,
aunque me digas que soy una pesada.
Interrumpir tu trayectoria,
y obligarte a besarme
para continuar tu camino.
No dejarte
acabar tu historia
porque te deseo.

Me gusta besarte,
aunque me digas que soy una pesada.
Te intentas deshacer de mi,
desenredandote
de mis abrazos.
Te ríes
y me suplicas
que te deje acabar tus frases.

Me gusta besarte,
aunque me digas que soy una pesada.
Pero sonríes
cuando descubres
que ya no te escucho.
Pierdes la paciencia
y me arrastras
hasta la cama.

Me gusta besarte,
aunque me digas que soy una pesada.
Y aunque tus besos
sean recuerdos más que realidad
me sigue gustando besarte.